Ay Melilla
Cuando yo llegue a Melilla
hace ya bastante tiempo
era aun muy chiquitilla
pero todavia me acuerdo.
Porque alli fui muy feliz
Tengo muy buenos recuerdos
De aquella calle Bolivia
Y de mi primer colegio,
de nombre Garcia Valiño
donde iba a estudiar
con muchas niñas y niños.
Subía a la fuente de Trara,
para llenar el botijo
con agua fresquita y clara.
Las dos gordas de arropia
que te cortaban de un palo
era dulce y retorcía.
Los domingos a la bola
Ibamos a merendar
y pasábamos la tarde
no paraba de jugar.
Los guateques domingueros
nunca me senté en la silla
no paraba de bailar
con mi amigo el Malaguilla.
Los paseos en la Avenida
cuando era jovencita,
Un café en El Buen Gusto
y volver pronto a casita.
También íbamos a misa
al Sagrado Corazon
con el velo en la cabeza
y con mucha devoción.
Aquella esquina de calle
que siempre estaba ocupada
por un joven pretendiente
que decía que le gustaba.
En fin son buenos recuerdos
que guardo en el pensamiento
aunque también tengo otros,
pero esos, no los cuento.
Y de Melilla me fui
con tristeza y con pesar
por eso siempre que puedo
yo la vuelvo a visitar.
A. E. C.